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viernes, 18 de julio de 2008

I Have a Metroflog (II)

De vuelta a su casa, Estela notó que no había nadie pero no pasaron unos segundos cuando se abrió la puerta, era su hermano mayor, Pepe (23 años de edad y estudiante de Informática) que estaba -como quién dice- vigilando la casa.
-Oimes Pepe, ¿Y mamá y papá?- preguntó Estela.
-No sé exactamente, dijeron que fueron a rescatar a un ponny en un rancho, pero sinceramente no lo sé-
-Ay, es que les iba a preguntar algo- decía Estela con cara de preocupación.
-Pos por qué no me lo preguntas a mí, ¿para qué soy bueno?- Se jactaba Pepe.
-Pues es que fíjate que estaba con mis amigos jugando al parque y luego Oswaldo nos dijo que había visto algo superarchirecontrainteresante en el Internet-
-¿Un video de Luis Pazos drogandose?- preguntó Pepe.
-No, (animal), vimos un sitio llamado Metroflog- reclamaba Estela.
-Oh, ya veo- Decía con frialdad su hermano mayor.
-¿Y porqué lo dices como si no te importara? Sí es lo mejor que hay por la Red- le volvía a reclamar la pequeña blonda.


-Bueno, para comenzar, es algo divertido tener un metroflog...-Díjose Pepe.
-Haista, ya ves, voy a crear una cuenta de metroflog- Decía con orgullo la nena.
-Eh, eh, eh, eh, pérese que NO he terminado- comentaba indignado Pepe -Dije que es algo divertido tener un metroflog, puedes así conocer amigos por todo el mundo (o al menos en Latinoamérica), pero el problema radica en que a veces te puedes topar con emos, antiemos, vaqueros, payasos, anticristianos, jóvenes de la vida galante, americanistas y en general gente que les urge un amigo o que no tienen vida-
-Entonces, ¿tener un metro es malo?- decía con algo de tristeza Estelita.
-Bueno, no es malo, sólo hay que tener precauciones, es más, te voy a mostrar cuál es la diferencia entre un buen metro y uno muy malo- Decía Pepe.
Y es así como los hermanos Poot fueron al cuarto de Estela para checar algunos metroflogs.
-Vamos a ver esto- le decía Pepe -Para comenzar, un metro bueno y uno malo aparentemente son idénticos, pero el chiste es la manera en que te expresas y comentas algo que en verdad sea interesante no sólo para tí, sino para tus amigos, y por eso te firman, por ejemplo, tenemos este metro que cumple con los estándares, la muchacha escribe a manera de bitácora y sus amigos comentan y opinan sobre lo que escribió, ese es un BUEN metro-
-Wow, algún día quisiera ser como ella- Exclamaba asombrada Estela.
-Pero ten cuidado- le decía Pepe -Hay otros que nomás ponen pendejadas y media, no escriben nada y para colmo casi nadie lo firman, como este patético niño-
-Ay- Decía conmovida Estela -Lo quiero firmar, aunque sea un eterno alcohólico-
-NO, no le des importancia a ese insecto- gritaba Pepe, de la misma manera como si fuera Vegeta
-Uuuh, vamos a ver que más hay- decía impaciente la pequeña rubia.
-Sí, pero ten cuidado con lo que te...-
La advertencia de Pepe fue interrumpida puesto que se habían topado con el metroflog del general Elías (sí chicos y chicas, el mismísimo general Elías).


-Uh, uh, lo conozco, es tú amigo el musculoso dientón, vamos a ver las fotos que tiene- decía eufórica Estela.
Luego, ambos se dispusieron a ver las fotos que tenía del ex-guerrero chango, pero luego había fotos que comenzaron a intimidar a ambos, pero conforme veían más fotos se ponía algo candente y disparatado para los dos: Estela quería ver más y más, mientras que Pepe se indignaba por las poses sugestivas, que luego pasaron a ser eróticos y al final se toparon con escenas sexualmente explícitas.
-Estela, te PROHIBO ESTRICTAMENTE VER CIERTOS METROS- Bramaba con sumo enojo y vergüenza Pepe, mientras tapaba los ojos a Estela, puesto que la última foto era de cuando trabajaba de stripper en un bar gay (claro, antes de meterse a trabajar en una librería de quinta).


Una vez pasada la censura y ya sola en su cuarto, Estela creo una cuenta de metroflog.
-Se llamará www.metroflog.com/Estelitaprincess- Se decía.
Y luego checó los metroflogs más famosos de su ciudad y uno que otro del resto del país.
-Wow, me encantan este, este, este y también este, son chidos- decía felizmente la niña.


-Wow, el mundo del metroflog es tan fascinante, hay muchos que me encanta, SÍIII!!!!-
Estela estaba muy feliz de tener su propio metro, y claro, tenía que subir una foto (o en este caso, pick), y ponía una en donde estaba su bella carita con su uniforme de scout. Se veía muy guapa la rubiecita cabroncita. Como dato interesante, antes de dormir, Estela volvió al metro de Elías (www.metroflog.com/monkeywarrior70) para disfrutar de...
...
mmmm (como lo podré decir)
...
...
... su cara dientuda.

Al día siguiente, Estela se reune con sus amigos para platicarle acerca de los metros y de que ella también ha creado una cuenta.
-¿En serio? No puedo creerlo- decía Pillo -Yo también tengo un metroflog-
-Sí, yo tambor- decía con desenfando Rolga.


Y todos estaban así de felices porque ya todos tenía un metroflog, se compartían sus direcciones, decían cuáles eran sus fotos que subieron, comentaban a quienes pusieron en sus favoritos; todos estaban de plácemes, excepto claro...

...Pércival Méndez.

(continuará)

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