El porqué de mi larga ausencia

Bueno, al fin ya terminó la primera semana de trabajo docente en la primaria. Debo recordarles que el total de semanas en prácticas de este año escolar serán de 24, una mitad para este VII semestre y obviamente la otra parte en el VIII (y último) semestre; claro, de esas 12 semanas, las principales ocho se concentran en estos meses de octubre y noviembre. Ahora a lo que nos truje chencha: estuve muy ocupado en estos días debido a que como planeo con la compañera normalista del otro sexto, pues estuvimos muele y muele en cuanto a los planes y materiales, digo, elaborar una planeación de una semana no es tan difícil (después de seis semestres es casi pan comido, aun cuando se haga con base en la mentada reforma educativa), pero el tiempo, ¡ay, el tiempo! Me he tenido que adaptar a su ritmo de trabajo y pues casi elaboramos las mismas cosas casi al mismo tiempo. Yo sólo espero que la situación que se presentó en esta semana sea pasajera, digo, para ser primer día, es prácticamente de "ensayo y error" tratar de elaborar una secuencia didáctica.
Pero también hay otras cosas en donde -para desgracia de ustedes, car@s lector@s- ciertas cosas me delimitarían el tiempo, como reforzar a los niños con problemas de aprendizaje en las tardes o escribir el pinche diario, pero bueno. También espero que logre acoplarme a este ritmo de trabajo, para que así pueda tener una vida normal, es decir, que trabaje en hacer mis cosas escolares pero que también tenga chance de descansar (y es que se requiere tener agallas para tratar a 29 pubertos) y es que claro, ya llevo más de un mes sin subir nuevas caricaturas -y eso que desde hace semanas que no dibujo, lo cual eso ya es grave-.
Por lo pronto, trataré de estar un poco más seguido por acá, y no dejar abandonado el blog (del twitter y facebook no tanto, dada la rapidez y fácil acceso a estos).





(Espero...)